Monday, October 15, 2012

Al acabar el día...














Vamos a jugar a que en realidad está saliendo el sol. A que esta penumbra es la que precede al día más radiante. Contaremos hasta 100 y nos esconderemos de la prima de riesgo, del inmigrante sin derecho a atención sanitaria, y de la ministra que nos pide un esfuerzo, desde los tacones de una nómina de unos sangrientos ceros, en los que se ahorcan millones de personas. De mancos zurdos o diestros, sustituidos por gente que se da la mano. Montemos un país privado en el que nadie imponga referendums ni existan las banderas. Y todo el mundo quiera bailar con la más fea. Que el paro sea mirar antes de cruzar, y la caída de la bolsa signifique que está cargada de sustento. Que las diferencias supongan complementarse y aprender. Y que nunca nadie piense, que estuvimos mejor ayer. Juguemos a que nadie está abandonado, nadie muere congelado, y nadie sufre por vivir. A que hay sitio para todos, a que odio tiene menos letras que amor, y a que a nadie le falta calor. 

Vamos a jugar a que sale el sol.

Tú la llevas...